Vela todo el año: las mejores rutas invernales en las Islas Canarias

El archipiélago canario es el lugar perfecto para practicar vela todo el año. Te contamos por qué.

Contenido

“… Viento en popa a toda vela / no corta el mar sino vuela…”. Los recordados versos de “La canción del pirata”, de José de Espronceda, deberían recitarse cada vez que se surcan las aguas de las Islas Canarias. “… Que es mi barco mi tesoro / que es mi Dios la libertad / Mi ley, la fuerza y el viento / mi única patria, la mar…”. Porque pocos lugares hay en el mundo como este archipiélago: se puede navegar durante todo el año disfrutando de un clima agradable y de unos vientos que permiten manejarse sobre las olas a las mil maravillas, ya sea en rutas que buscan la tranquilidad y la constancia de los vientos alisios como en salidas a rincones donde hay que echar mano de experiencia para superar situaciones más agitadas. Sea cual sea el caso, con el mismo viento constante apenas se usa el motor salvo para maniobrar en el puerto. 

Contenido

La palabra “alisios” tiene la raíz latina alis. Se usó por primera vez en francés en el siglo XIII para describir los vientos que recorren el Atlántico: son lisos, es decir, amables, regulares, sin apenas rachas más fuertes que otras. Ideal para surcar los mares. Y pasan por las Islas Canarias.
 

Contenido

Como hay condiciones perfectas para navegar, en el archipiélago canario se navega, y mucho. Y también hay mucho nivel, como lo demuestra la inagotable cantera de deportistas náuticos que han salido de sus costas. Numerosos medallistas olímpicos son la punta de un iceberg que va más allá del brillo de los metales cosechados por estos elegidos. El ecosistema de la vela en las Islas Canarias, con instalaciones, competiciones y escuelas de primer nivel, lo hace todo más fácil. Cualquiera puede entregarse a la vela: Finn, 470, Flying Dutchman, Soling, Tornado, Star, Laser y Vela Latina… Hay casi una cuarentena de puertos deportivos y marinas, y decenas de empresas náuticas en las que alquilar embarcaciones con o sin patrón.
 

Contenido

Como las Islas Canarias gozan de un clima suave durante todo el año, considerado el mejor del mundo, se puede navegar también en invierno, con una temperatura media de 22º C, casi con las mismas condiciones que en verano, con una media de 26º C. Y los cielos claros y despejados, con escasas precipitaciones, gracias a los vientos alisios y el anticiclón de las Azores, favorecen los días soleados y con muchas horas de luz, más que en ningún otro lugar de Europa.
 

Contenido

Las Islas Canarias son ocho (Tenerife, Gran Canaria, Lanzarote, Fuerteventura, La Palma, La Gomera, El Hierro y La Graciosa), lo que multiplica las posibilidades a la hora de hacer travesías en las que, siempre, se disfruta de paisajes y de fondos marinos espectaculares. Una de las ventajas de este rincón del Atlántico es que las distancias entre islas no son muy grandes, de manera que se pueden cubrir a vela en menos de una jornada.
 

Contenido

Una ruta muy agradecida es la que va de Gran Canaria (una buena opción es partir de Mogán, un puerto de pesca también convertido en marina) a Fuerteventura, haciendo parada en Morro Jable, localidad del municipio de Pájara ubicada en el sur de la isla. Desde allí, por ejemplo, se puede alargar el periplo y alcanzar la vecina Lanzarote. Una vez en tierras de César Manrique, vale la pena fondear en las tranquilas y paradisiacas playas de Papagayo. También resulta fácil dirigirse a la isla de La Graciosa, en el norte de Lanzarote, para disfrutar de su serenidad y de calles aún sin asfaltar.
 

Contenido

Desde la otra isla capitalina del archipiélago canario, Tenerife, se puede mirar hacia el oeste y poner rumbo desde el puerto deportivo de Marina San Miguel (con comodidades como electricidad, baños, internet…) a La Gomera. La travesía por la costa tinerfeña está jalonada de tesoros como las playas de La Tejita, Las Vistas, Fañabé, San Juan o El Duque, la bahía de Antequera (accesible solo por mar), y acantilados como Los Gigantes, además de la posibilidad de avistar cetáceos. De camino a La Gomera se puede atracar en los puertos de Las Galletas o de Los Cristianos. Una vez en La Gomera (allí se puede amarrar en Marina La Gomera, puerto de Playa Santiago y puerto de Las Vueltas, o fondear en la playa del Cabrito), se puede dar un “salto” a El Hierro o La Palma. Y continuar disfrutando de la navegación como si se tratara de un verano o una primavera eternos, aunque sea invierno.